La plaza que da entrada a la Iglesia Parroquial se encuentra dentro de la finca donada a la diócesis de Tenerife por la Sra. Dña. María Amalia Frías Domínguez, benefactora de esta comunidad cristiana, en el año 1924.
En esta plaza, como en cualquier otra del municipio, con el fin de fomentar la convivencia, no están permitidos, entre otros, los juegos con balón. Asimismo debe de mantenerse el silencio mientras tiene lugar algún oficio religioso en la iglesia (confrontar con las normativas municipal y estatal abajo indicadas). El no respetar estas dos normativas conllevará denuncia y aplicación del régimen sancionador por la autoridad competente (policía local o nacional).
Si usted está interesado en ocupar dicha plaza para realizar alguna actividad organizada, debe comunicarlo al Párroco y entregarle rellenado el formulario abajo indicado.